Más actividades y recuerdos de nuestra estancia en Dublín

Hace unos días repasábamos lo que habían sido los primeros días de nuestro viaje a Dublín de este año, compartimos con vosotros un montón de fotos del viaje, la espera en el aeropuerto y nuestras visitas al centro de Dublín, al conjunto monasterial de Glendalough o a la preciosa mansión conocida como Powerscourt House. Si no sabéis de lo que estamos hablando es porque no visteis este artículo, https://www.academiadublin.es/cronica-imagenes-primeros-dias-en-dublin-2019/, así que lo primero es lo primero, ¡echadle un vistazo sin falta!

Vamos a seguir compartiendo con vosotros imágenes del viaje y la estancia por tierras irlandesas y, de hecho, continuamos justo por donde lo habíamos dejado: domingo 30 de junio. Ese día lo dedicamos a visitar la maravillosa ciudad de Bray, seguid leyendo si queréis descubrirla con nosotros y saber lo que hicieron nuestros alumnos por allí.

Visita a Bray y su preciosa playa

Para aquellos que no conozcan la ciudad de Bray, decir que está situada en el límite norte del condado de Wicklow, justo en la línea de demarcación con el condado de Dublín, hasta el punto de que varios de sus barrios periféricos del norte pertenecen a este otro condado. De algún modo, este hecho hace que la ciudad de Bray forme parte tanto geográfica como económicamente de la aglomeración urbana de Dublín, la capital de Irlanda. Hasta tal punto esto es así que Bray recibe los servicios de transporte urbano de Dublín.

No obstante, Bray no sólo limita con Dublín (cosa que sucede en su parte norteña), también linda en su parte oeste con las impresionantes Montañas de Wicklow. Este hecho hace que Bray sea conocida por el sobrenombre de la “Puerta de entrada de los Montes de Wicklow”. Nuestros alumnos fueron testigos privilegiadas de la belleza de estos montes y de las increíbles vistas que se pueden observar desde ellos, tal y como podréis comprobar en las fotos que acompañan este post.

Las Montañas de Wicklow no son el único atractivo turístico de Bray, de hecho, su máximo atractivo está en su bella playa. No es demasiado extensa (aproximadamente 1,6 kilometros) pero está rodeada de una amplia explanada y se ha convertido en un lugar de paseo y relax de cientos de dublineses que se trasladan expresamente hasta allí todos los fines de semana para disfrutar de este bonito y tranquilo paisaje. Destacar también, aparte de la playa y llanura de Bray, la desembocadura del río Dargle y el cercano Monte Bray Head con sus 241 metros de altura.

El Museo Zoológico de Dublín: una visita que difícilmente olvidarán nuestros alumnos

El resto de días que estuvimos en Dublín y sus alrededores también dieron mucho de sí y necesitaríamos varios artículos más para poder hablaros de todas las actividades y excursiones que realizamos, por eso, vamos a hacer una pequeña selección de algunos de los momentos más destacados, empezando por nuestra visita a “The Zoological Museum”, es decir, El Museo Zoológico de Dublín, el hogar de muchas de las criaturas que podemos encontrar, no sólo en Dublín, sino en todo el planeta.

Esta visita fue una de las que más gustó a nuestros jóvenes acompañantes y no es para menos ya que este fantástico museo ofrece a sus visitantes una experiencia interactiva y completamente participativa: nuestros alumnos tuvieron la oportunidad de sostener el colmillo de un narval, medir el cráneo de un hipopótamo, mirar a través de las fauces de un gran tiburón blanco o coger con sus propias manos a una escurridiza y juguetona serpiente.

Dicho museo está situado en el campus del Trinity College de Dublín, el cual no podíamos dejar sin visitar, claro está. “The Zoological Museum”, destaca por su colección de animales procedentes de toda Irlanda y también del extranjero, con un total aproximado de 25.000 especímenes. Esto se complementa con las bonitas obras de arte en vidrio de criaturas marinas creadas por el equipo formado por Leopold y Rudolf Blascka (padre e hijo respectivamente) durante el siglo XIX. ¡Sin duda alguna, una visita inolvidable!

Sports Day: el día de las competiciones deportivas

Otro de los eventos que disfrutaron a lo grande nuestros alumnos y alumnas fue el llamado “Sports Day”, es decir, el “Día del deporte”, con una increíble competición deportiva en donde nuestros jóvenes acompañantes llevaron y defendieron el color amarillo hasta las últimas consecuencias. De hecho, no sólo vistieron camisetas y prendas de dicho color: ya veis en las fotos que muchos de ellos se pintaron la cara con estos colores para motivarse al máximo. ¡Sois unos auténticos campeones!

Los chicos y chicas corrieron, se persiguieron mutuamente, esquivaron obstáculos y se cayeron varias veces, pero se levantaron y siguieron adelante como los mejores competidores. Lo más importante es que se lo pasaron genial y formaron una auténtica “piña”, un equipazo al que daba gusto pertenecer. Y es que el deporte y los juegos siempre combinan bien y este es un buen ejemplo de ello.

Quedan muchas actividades que presentaros, muchos otros días por recordar, al fin y al cabo fueron casi 22 días de estancia en tierras irlandesas y eso son muchos días, pero eso ya será en otra ocasión. Por esta vez ya es suficiente, permaneced atentos a nuestro blog y a nuestras redes sociales y muy pronto publicaron otro post más contándoos muchos más detalles de este increíble viaje que tanto ha gustado a nuestros alumnos.

Ya lo sabéis: el año que viene contamos con todos vosotros, realizar el programa de estudios en el extranjero de Dublin School of English es toda una experiencia, tal y como vosotros mismos estáis comprobando, y no te lo puedes perder por nada del mundo. ¡Feliz mes de agosto para todos!